Pantuflas de tela

Hola a tod@s!!

Hace unas semanas os enseñé como hacer unas zapatillas de ganchillo para abrigarnos los pies en los fríos meses de invierno, pero el tiempo va pasando y las temperaturas subiendo, por lo que necesitamos unas zapatillas más fresquitas para estar agusto en nuestra casa, así que os voy a enseñar como hacer unas pantuflas de tela de una forma facilísima.

Necesitaremos:

•  Tela elegida
• Guata o relleno de cojín
• Cinta de 2cm aprox. de ancho
• Chaclas
• Lápiz, aguja, hijo, alfileres y tijeras

Empezaremos nuestras zapatillas dibujando el contorno de nuestras chanclas al que sumaremos aproximadamente un centímetro más para las costuras y repetiremos esta operación para que nos queden dos piezas de cada pie. Uniremos con alfileres cada par de piezas iguales para que nos de un poco de grosor a la suela y de paso nos aporte una sensación más mullida a la hora de utilizar las zapatillas.

Ahora tenemos que preparar la parte de fuera de las zapatillas, así que cortaremos un rectángulo en el que a lo largo entren las dos partes de la zapatillas y haremos de nuevo el contorno de nuestro pie utilizando las sandalias o zapatos que hayamos elegido, sumandos igualmente un centímetro a la hora de marcar con el lápiz o rotulador.

Lo dibujaremos en la "suela" y doblaremos el rectángulo de tela por la mitad, uniendo con alfileres enfrentando los derechos de la tela.

El siguiente paso será coser las dos partes de guata o relleno de cada pie para que no se mueva en el interior de la zapatilla y recortar el exceso siguiendo la línea que hemos dibujado. De la misma manera recortaremos la tela que sobra de la zapatilla por fuera de la línea marcada, no dejando más de medio centímetro para que al dar la vuelta no se hagan bultos. En la tela dejaremos unos 5 cm sin coser para poder voltear (yo los dejé en la parte delantera de la zapatilla, pero creo que es más fácil y además supondrá un mejor acabado el hacerlo en la parte lateral interior.

Continuaremos introduciendo el relleno dentro de la tela, esto lo haremos con cuidado y paciencia para que quede bien estirado en el interior y no se nos queden bultos que nos incomoden al andar posteriormente. Y para rematar la suela tan solo nos queda coser todo alrededor dejando medio centímetro desde el borde exterior, uniendo todas las partes de la suela en una sola y aprovechando para cerrar la parte que habíamos dejado sin coser para poder introducir el relleno de la zapatilla.

La parte más laboriosa ya la tenemos terminada, ahora sólo queda elegir la forma en la que sujetar la chanclas a nuestros pies. Yo no las quería de "dedo", así que con una cinta de raso de otro color y de no más de un metro de largo, hice cuatro tiras midiendo con mi pie encima y sujetando con alfileres para que no se movieran al colocar para coser. Tomaos vuestro tiempo para que os ajusten bien y no se os salgan o por el contrario os queden demasiado ajustadas para meter el pie.

Despacito y con un poco de tiento doblaremos el final de la cinta en los cuatro extremos sobre sí misma para dar un acabado que no se deshaga y coseremos por encima de la costura con la que asentamos la zapatilla por la parte exterior. Lo último que yo hice fue unir las dos tiras por el centro con unas puntaditas para que no se separasen al meter el pie sin agacharse, pero podéis decorarlas si queréis. Ya tenemos nuestras pantuflas de tela para los meses de calor.

Diadema de tela

Hola a tod@s!!

Las temperaturas están subiendo, el veranito se acerca y con él las ganas de añadir colores y frescura a nuestro aspecto, pero sin gastar mucho y aprovechando lo que tenemos, así que se me ocurrió enseñaros a hacer una diadema a partir de una blusa pasada de moda. Espero que os guste.

Necesitaremos:

• 3 Retales de tela o de cinta tipo gasa, raso, seda etc.
• 1 Retal de tela del doble de ancho que las anteriores del mismo tipo de tela.
• Base para diademas (podéis usar una diadema que ya no os guste)
• Pistola de silicona
• Aguja, hijo, tijeras y alfileres.

Lo primero será coger la cinta de tela más ancha, de unos 2 cm para la diadema que he utilizado yo, y doblarla por la mitad. Lo sujetaremos todo con alfileres, o si lo necesitáis, se puede hilvanar para que sea más fácil coserlo y bien a mano, bien con la máquina, coseremos la tira de arriba a abajo.

Lo siguiente será darle la vuelta para que quede la parte "bonita" hacia afuera. Esto es una tarea un poco ardua, que lo mejor es que ós toméis con paciencia y lo hagáis despacito, porque con este tipo de tela podéis descoser o incluso romperla y tener que empezar de cero, así que coged un ganchillo o un boli y despacito ayudaros de ellos para ir volteando la tira resultante.

Un vez conseguido meteremos la base de diadema y la ajustaremos lo más posible, colocando la costura en la parte de fuera, es decir en la que se vería. Es un buen momento para enchufar la pistola de silicona y que vaya cogiendo temperatura mientras avanzamos con nuestra diadema.

Ahora con las tres tiras iguales que tenemos, las coseremos para unirlas por uno de los extremos y ayudándonos de una base donde clavar con un aguja las tiras (por ejemplo el apoyabrazos del sofá) haremos una trenza sueltecita, sin preocuparnos de que quede perfecta, porque el hecho de que se deshilache un poco la tela o quede algo deshecha es lo que le aportará el toque vintage a la diadema.

 

Remataremos con un nudito los extremos de las trenzas y como ya tendremos bien caliente la silicona empezaremos a pegar la trenza alrededor de la diadema, tapando la costura de la tira anterior. una vez pegada sólo nos quedará rematar los extremos que con una gotita de silicona, y sobre todo con mucho cuidado de no quemarnos, puesto que coge bastante temperatura, uniremos  la tela cubriendo el borde de la base de la diadema. Cortaremos los nudos hechos en la trenza con mucho cuidado y pegaremos de la misma manera con otra gotita de silicona caliente procurando que quede totalmente escondida.

Y... ya tenemos accesorio nuevo!!

Flor de Foam

Hola chic@s!

En esta ocasión os traigo un nuevo material, muy barato, manejable y lleno de posibilidades, el foam o goma eva o fomy. Todos estos nombres engloban una espuma con la que realizar infinidad de trabajos, y a la que recurriréis siempre que no sepáis cómo hacer algo que se os haya ocurrido.

La historia de esta entrada comenzó precisamente por querer personalizar un regalo y no encontrar exactamente la forma de hacerlo; quería hacer una flor, pero de tela o de papel no acababa de convencerme para usarla en un envoltorio, y finalmente se me ocurrió utilizar el foam.

Los envoltorios nos darán mucho juego más adelante, porque creo que los regalos son más especiales si se cuidan todos los detalles, y el envoltorio, al fin y al cabo, es lo primero que se ve.

Necesitaremos:

• Foam verde y rosa
• Tinta roja y esponjita
• Rotuladores rosa y verde
• Pistola de silicona o silicón líquido
• Tijeras y lápiz

Lo primero será dibujar las hojas en un pedazo de foam verde y recortarlas. Yo no utilizo patrones pero si lo preferís podéis buscar plantillas para dibujar y que os quede todo más regular.

Para que la base que hemos cortado se convierta en una hojita, tendremos que dibujar las rayitas como en la foto y si queréis pintar con rotulador verde los bordes en la punta de la hoja.

A continuación cogeremos la hoja de foam de color rosa y la dividiremos en cuatro partes de más o menos 2cm, 2cm. 5cm y 10cm; sobrará un trocito pero para este tamaño de flor no me valía. Cortaremos en tiras las divisiones que hemos hecho para empezar a dibujar los pétalos.

Para conseguir nuestros pétalos dibujaremos corazones ocupando toda nuestra tira, aprovechando el espacio para que nos salgan las más posibles. Después los recortaremos y los agruparemos por tamaños para que nos sea más fácil luego montar la flor.

Para darle un toque más realista seguiremos la misma técnica que con las hojas, pasando el rotulador rosa por los bordes sin necesidad de colorearlos en su totalidad, ni que queden homogéneos. Y con una esponjita de maquillaje y tinta roja (en este caso en crema pero con cuidado vale cualquiera) iremos dando toquecitos por los pétalos "manchádolos" todo lo que queramos.

 

 

Ya tenemos todo preparado para empezar a formar nuestra flor, así que enchufaremos nuestra pistola de silicona y cuando esté bien caliente comenzaremos a unir los pétalos. Empezaremos girando un corazón pequeño sobre sí mismo y lo envolveremos con otro del mismo tamaño. Así iremos añadiendo los pétalos más pequeños, envolviendo el primero y girando alrededor.

A partir de aquí la imaginación y el gusto de cada uno formarán la flor; yo quería una flor grande así que he utilizado muchos pétalos de 3 tamaños, pero si se quiere algo pequeñito la foto anterior ya muestra una flor para decorar lo que queramos.

La flor está preparada, pero para que quede perfecta nos queda un paso más: cortaremos los picos de todos los pétalos para que la flor quede uniforme por debajo y podamos pegar un trocito de foam del mismo color para tapar todas las uniones y que se convierta en la base para pegar las hojas de nuestra flor.

Por último abriremos los pétalos hacia atrás para que "florezca" y la colocaremos con un poquito de silicón líquido, o simplemente un trocito de celo en nuestro envoltorio. Yo lo he rematado utilizando papel de estraza que me gusta mucho para envolver regalos y una cinta de raso rosa y la verdad es que no dejó indiferente a su destinataria...

 







Amigurumis 1

¿Qué tal? ¿cómo estáis?

Esta entrada es para y enseñaros un poco el maravilloso mundo  de los Amigurumis. Una de mis manualidades favoritas (bueno de mis labores) es hacer ganchillo, pero siempre se ha tenido la idea en la cabeza de que es un hobby de abuela y que no se pueden hacer más que tapetes, y colchas pasadas de moda, pero nada más lejos de la realidad. La lana, el hilo, el algodón... y el ganchillo adecuado, pueden dar vida a labores creativas y originales como es el caso de los amigurumis.

Los amigurumis son muñecos de ganchillo que surgieron en Japón y que rápidamente se han extendido por todo el mundo. Son sencillos de hacer una vez que aprendes las directrices básicas y permiten que la imaginación vuele pudiendo dar vida a cualquier cosa que se te ocurra.

Ahora están muy de moda los dulces, pasteles, tartas y bombones hechos de lana, con los que se te hace la boca agua, pero a mí personalmente me gusta más hacer muñecos, crear pequeños personajes llenos de detalles que parece increible que puedas conseguir cuando tan sólo tienes un ovillo y un ganchillo.

Estas son algunas de mis creaciones:

         La bailarina                                                                                                              El Caballero

                                                                             El Ninja

          El Espartano                                                                                                                 El Vaquero

El Monito ladrón

Goku es uno de mis favoritos, y de los más difíciles, quizá no sea el que mejor queda, pero cuando me lo pidió mi hermana me parecía imposible, y sin embargo aquí está ...

Y finalmente el que más trabajo me ha dado pero probablemente, junto con el primero que hice, de los que más orgullosa estoy, mi navideño Belén de lana al que intenté que no le faltase detalle.

¡¡Espero que os gusten!!

Saquito de arroz

Hola!!

Hoy voy a enseñaros como hacer una bolsita de arroz para calentaros las manitas, los pies o la cama en los días en los que el frío aprieta con fuerza. Es muy sencillo y rápido de hacer y os aseguro que le sacaréis mucho partido.

Vamos a necesitar:

• Dos retales de tela del tamaño que queráis (pero ojo que quepan en el microondas)
• Arroz (máximo 1 kg)
• Tijeras, aguja, alfileres e hilo.

Lo primero será preparar los retales de tela para que tengan el mismo tamaño y asegurarnos de que se trata de un material que no se deshilache en exceso y que tenga fuerza para mantener al final el peso del arroz. Yo he utilizado tela de tapicería y como sí que se deshace bastante, (aquí viene un truco que os servirá en muchas ocasiones) he pintado con un pincelito todo el borde de la tela con cola blanca que al secar no se ve y hace que la tela quede tiesa y no se deshilache; eso sí no pongáis demasiada, sólo en los bordes, porque sino no hay quien manipule la tela después.

Una vez tengamos preparados nuestros trozos de tela los superpondremos con el derecho de la tela enfrentado, lo sujetaremos con alfileres para que no se mueva y coseremos todo alrededor dejando aproximadamente 10 cm sin coser en uno de los laterales.

Por este trocito sin coser es por donde le daremos la vuelta a nuestro saquito y asentaremos las esquinas para que quede con la forma que hayáis decidido lo más definida posible.

Es hora de echar el arroz dentro del saquito, la cantidad no os la puedo dar yo, dependerá el tamaño de vuestro saquito, pero no lo llenéis en exceso, lo adecuado es llenar 2/3 de su capacidad, de manera que se mueva sin problemas en el interior.

El trocito de tela que queda abierto lo coseremos despacito, con las puntadas juntitas y lo más invisibles posible para que no llamen la atención. Tomaos vuestro tiempo, se puede coser tan bien a mano como a máquina si se hace con mimo.

Hemos terminado nuestro saquito de arroz!! ahora sólo tendremos que meterlo en el microondas cada vez que queramos un poquito de calor, parando el micro a los 30 segundos y a partir de ahí ir sumando segundo poquito a poco, con cuidado de no quemarnos. Animaos con el saquito y lo agradeceréis cuando vuestra cama esté calentita al entrar en ella :)

Chucherías que no se comen

Esta nueva entrada repite material, el Fimo, porque quiero que veáis lo fácil que es utilizar materiales que pueden parecer para expertos en manualidades por tener que usar hornos, barnices y herramientas, cuando por el contrario se pueden hacer cosas muy bonitas facilmente.

Vamos a imitar el aspecto de las chucherías para hacer un conjunto de collar y pendientes super sencillo, y que aportará personalidad a vuestro look.

 

Necesitaremos:

• Fimo naranja, verde y amarillo
• Cutter
• Fornituras para pendientes y collares
• Rodillo

Lo primero será amasar un ratito en las manos la arcilla para ablandarla y con el rodillo hacer una lámina que enroscaremos sobre si misma para formar un rulito que con la palma de la mano y la mesa haremos girar y girar hasta que tenga el ancho y el largo deseado.

Repetiremos lo mismo con los tres colores y cortaremos por lar mitad el rulito para obtener 6 piezas que serán la base de los pendientes.

 

Ahora tendremos que coger una pieza de cada color y pegarlas un poquito, presionando con los dedos sin hundir los rulitos. Repetiremos esta operación dos veces y haremos girar los rulitos sobre la mesa suavemente cortando los extremos para que queden rectos y homogéneos.

Lo único que tenemos que hacer para que parezca una deliciosa chuchería es girar sobre si mismo el Fimo, más o menos según el aspecto que queráis darle. Antes de meterlos al horno introduciremos unos bastoncillos desde abajo para poder enganchar luego las fornituras de pendientes.

Para el colgante haremos exactamente lo mismo pero con las piezas de mayor tamaño, y hornearemos todo según las instrucciones de la pastilla de Fimo utilizada, lo normal 130 grados, 30 minutos aproximadamente.

Para finalizar, barnizaremos las piezas y le podremos el cordón al collar. Mirad el resultado!!